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El Gobierno da un mes al Consell para que respete la ley antitabaco

Salgado censura que la norma valenciana no separe a los fumadores

La Ministra de Sanidad, Elena Salgado, ha enviado un requerimiento a la Generalitat para que respete la ley antitabaco. El Gobierno cree que el decreto autonómico contraviene la ley en dos aspectos: no se separa físicamente el espacio de los fumadores y eleva de 100 a 120 metros cuadrados la superficie a partir de los cuales los bares han de proteger estancias. La consejería entiende que el decreto "hace posible" aplicar la ley.

Fuentes de la Consejería de Sanidad sostienen que el decreto aprobado por la Generalitat es "absolutamente respetuoso" con la norma estatal y cuenta con "todas las garantías jurídicas". Estas fuentes recordaron que la normativa autonómica cuenta con el respaldo del Consell Jurídic Consultiu de la Comunidad Valenciana "que no opuso objeciones" cuando fue consultado. Además, sostienen que gracias a la consejería "es posible la aplicación real de la ley" en el sector hostelero.

Para el Ministerio, sin embargo, al menos hay dos cuestiones que no encajan en la ley. Una es la referida a la separación de espacios. La normativa autonómica permite a los hosteleros utilizar "cualquier elemento que garantice que el espacio destinado a no fumadores permanece libre de humos", entre las que se incluirían las llamadas cortinas de aire. El hasta ayer consejero de Sanidad, Vicente Rambla, ha manifestado repetidamente su intención de que se puedan emplear equipos de extracción, barreras o purificadores de aire para mantener aisladas las zonas libres de humo. Según Rambla, al eliminar la obligación de separar los espacios físicamente, lo que acarrearía costosas reformas, el decreto "hace posible" su aplicación.

Pero la ley elaborada por el Ministerio de Sanidad, que este decreto desarrolla, habla explícitamente de "separación física del resto de dependencias" además de que debe de estar "completamente compartimentadas".

El otro punto de divergencia se refiere a la superficie a partir de la cual los bares están obligados a hacer obras para separar los espacios libres de humo de las estancias de fumadores. La ley habla de 100 metros cuadrados mientras que el decreto extiende esta superficie hasta los 120 metros cuadrados.

Diversas críticas

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Las críticas del ministerio no son las primeras que recibe la normativa autonómica. El vicepresidente de la Junta Provincial de la Asociación contra el Cáncer de Valencia, Antonio Llombart, censuró recientemente a Rambla, por haber "abierto la mano equivocadamente" y permitir "que exista cierta relajación en la aplicación de la ley antitabaco". Llombart hizo estas declaraciones durante la presentación de la campaña de recaudación de fondos contra el cáncer de este año.

También el responsable del Comité Nacional de Prevención del Tabaquismo, Rodrigo Córdoba, considera que la normativa valenciana contradice la estatal, de la que se nutre. E incluso fue más lejos al apuntar que la tecnología a la que alude Sanidad no existe. "[Con los equipos de extracción y tratamiento de aire actuales] se pueden eliminar parte de las partículas del tabaco e incluso bacterias, pero no los gases tóxicos y cancerígenos del tabaco, para lo que se necesitarían velocidades de intercambio de aire de unos 100 kilómetros por hora para que fueran eficaces". Además, aludió a los informes elaborados por la Asociación americana de Ingenieros de Calefacción, Refrigeración y Aire Acondicionado, que insisten en la falta de eficacia de equipos de desionización o sistemas de aire.

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