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ESQUÍ

Muere el campeón olímpico de esquí Francisco Fernández Ochoa

El deportista ha fallecido a los 56 años, víctima de un cáncer

Francisco Fernández Ochoa, campeón olímpico de eslalon especial en los Juegos Olímpicos de Sapporo 72, ha fallecido durante la pasada noche en su domicilio. Paquito, único campeón olímpico español en unos Juegos de Invierno, padecía desde hace meses un cáncer linfático. Tenía 56 años.

La clínica oncológica en la que estaba siendo tratado ha confirmado el fallecimiento, pese a que el ex esquiador abandonó el centro unos días atrás. Fernández Ochoa se proclamó campeón olímpico de eslalon especial en 1972 y dos años después obtuvo la medalla de bronce en la misma prueba en los Mundiales de St Moritz.

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Miembro de una familia de grandes esquiadores de la localidad de Cercedilla, en la madrileña Sierra de Guadarrama, su hermana Blanca también fue medallista olímpica, bronce en Albertville'92. El pasado día 27 recibió un homenaje en Cercedilla. En el que fue el último acto público de Paquito, las infantas Elena y Cristina descubrieron una estatua que le recuerda en el momento de recoger la medalla de oro. La Feria Esquí y Montaña 2006 también le rindió un homenaje el pasado viernes al que ya no pudo asistir debido a su deteriorado estado de salud.

La capilla ardiente con los restos mortales del campeón olímpico permanecerá abierta hasta mañana en su domicilio de Cercedilla. Desde primera hora de esta mañana se están acercando a la casa del esquiador vecinos y amigos.

El oro olímpico

Paquito Fernández Ochoa nació en la madrileña localidad de Cercedilla el 25 de febrero de 1950. El mayor de ocho hermanos se crió en el Puerto de Navacerrada. El pasado 27 de octubre, en el homenaje que le tributó su localidad natal, recordaba con cariño como su tío Manolo le quitó el miedo animándole a tirarse por las cuestas más empinadas o a cambio le daría "dos hostias".

El mayor de la saga Fernández Ochoa, comenzó a despuntar en su especialidad a principios de los años sesenta. No en vano, en su palmarés llegó a contar con 37 títulos nacionales en distintas disciplinas, una cifra al alcance de los más privilegiados.

Su gran día, sin duda, fue el 13 de febrero de 1972 cuando en el monte Taineyama (Japón) arrebató al italiano Gustavo Thoeni, gran favorito, el oro olímpico, que en aquel momento también conllevaba el título mundial, en el eslalon especial en el que se impuso al transalpino con gran superioridad.

Tras una grave lesión de rodilla, Paquito acudió dos años después a los Mundiales de Saint Moritz con la intención de rubricar su dominio en la disciplina de eslalon. Sin embargo, la ausencia de entrenamiento, tan sólo pudo practicar dos meses, le pasó factura y aunque en la primera manga superó a Thoeni, en la segunda no estuvo acertado y tuvo que conformarse con un bronce que le supo a gloria.

Ese mismo año, llegó su primera y única victoria en la Copa del Mundo, pues ganó el eslalon especial de Zapokane (Polonia). A pesar de no volver a un podio en una gran prueba, Paquito se convirtió en el gran referente del esquí español y llegó a defender en cinco ocasiones los colores nacionales en los Juegos de Invierno (Innsbruck 1964, Grenoble 1968, Sapporo 1972, Innsbruck 1976 y Lake Placid 1980).

Su hermana Blanca logró el bronce en en el eslalon de los Juegos de Albertville (Canadá) en 1992 y colocó nuevamente en el palmarés el apellido Fernández Ochoa. Tras su retirada, después de 15 años como profesional del esquí, siguió ligado al deporte, fue un gran apasionado del golf y del útbol, seguidor del Real Madrid, y se dejó caer por numerosos programas de televisión, y llegó a participar en un reality televisivo. El pasado año le fue diagnosticado un cáncer linfático.

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