Raúl ve muy escasas sus posibilidades de enfrentarse el sábado al Barcelona
Las posibilidades de que Raúl juegue contra el Barça el sábado son prácticamente nulas. "De 10 contra 90", según el jefe de los servicios médicos del Madrid, Alfonso Del Corral. El propio delantero pone en serias dudas su participación -"no quiero precipitarme", dice- y prefiere reservarse para el partido contra el Bayern Múnich de Liga de Campeones del día 29. Desde su entorno surgen voces que descartan de plano que el sábado se encuentre completamente recuperado de una de las lesiones más temidas: una rotura fibrilar, cuya recuperación precipitada puede originar una grave recaída.
Raúl sufrió el desgarro en el abductor de su muslo derecho el pasado día 12, contra el Málaga. "Se lesionó al hacer un mal gesto", explicó después de aquel partido Del Corral. El médico precisó ayer que los plazos de la recuperación de Raúl se han apretado en exceso y que cualquier retraso, por mínimo que fuera, descartaría su puesta a punto para el sábado, dado el celo que requiere el tratamiento de una lesión como la rotura fibrilar. "Está difícil", comentó el médico, que detalló los escalones que debe superar Raúl para reaparecer ante el Barcelona: debería comenzar a la carrera lenta el martes y el miércoles estar en condiciones de tocar el balón. Sólo en este caso le quedarían dos días -el mínimo recomendable- para entrenarse con sus compañeros, jueves y viernes. Todo ello supeditado a que la fisura en el músculo se haya cerrado completamente y a que el abductor responda con total normalidad. Es la única manera de evitar por completo una recaída en la rotura. "No quiero jugar si no estoy al 100%, porque no quiero sufrir una recaída", afirmó ayer Raúl. Sereno, con timbre cortante, el delantero pidió paciencia y dijo que guardará silencio hasta el viernes para anunciar oficialmente si juega o no. Raúl no quiere ni pensar en un asunto que le resulta perturbador. Sabe que el Madrid deberá salir a ganar el partido contra el Barcelona si quiere meterse en la carrera por el título y la posibilidad de no estar le amarga.
Raúl no es el único jugador que puede perderse el partido contra el Barça. Iván Helguera, que según el médico "tiene un estiramiento traumático en su pierna derecha", también puede quedarse fuera de la convocatoria. Savio, Julio César y Balic serán bajas seguras mientras que Morientes y Anelka entrenarán normalmente con el equipo esta semana. Morientes casi ha dejado atrás una contractura, mientras que Anelka, operado de un menisco durante el Mundial de Clubes, se pasó ayer la mañana rematando a puerta. "Tiene muchas ganas de jugar el sábado", dijo Del Corral, que confesó que ha tenido que dar descanso al francés para que no se pase de revoluciones antes de tiempo.
En cuadro en el Camp Nou
Mientras tanto, el vestuario del Camp Nou se quedó ayer casi vacío. Los jugadores del Barça no volverán a reunirse hasta el jueves. Louis Van Gaal tendrá a su equipo al completo a tan sólo 48 horas de saltar al Bernabéu. Los amistosos de las selecciones son la causa del éxodo azulgrana. En Barcelona tan solo se han quedado los dos porteros Hesp y Arnau, los delanteros Litmanen, Dani y Gabri, el capitán Guardiola, que ayer recibió el alta médica, y los lesionados Sergi, Frank de Boer y Simao.
Los otros 13 jugadores de la plantilla viajaron ayer con sus respectivas selecciones: los holandeses Kluivert, Reiziger, Cocu, Ronald de Boer, Zenden y Bogarde; los españoles Luis Enrique y Abelardo, que se integraron a la selección absoluta y Xavi y Puyol a la sub-21, el portugués Figo, el francés Déhu y el brasileño Rivaldo. Pese al éxodo azulgrana, la actividad en el Camp Nou no cesó. Van Gaal preparó la semifinal de la Copa Cataluña que jugará hoy el Barça en Balaguer. Para este choque, el técnico ha convocado a Guardiola.
Van Gaal no dispondrá hasta el jueves por la tarde de todo su potencial para preparar en dos sesiones preparatorias el clásico con el Real Madrid. La mayoría de internacionales azulgrana juegan en territorio europeo, por lo que el problema del posible cansancio del viaje de regreso no implica muchos problemas. Lapreocupación radica en Rivaldo. Brasil disputa el amistoso en Tailandia. El azulgrana partió ayer a las 8.00 horas rumbo a Bangkok en un viaje de casi 20 horas. Pese a que el Tailandia-Brasil se juega el míercoles, Rivaldo anunció el pasado domingo que será el primero de los azulgranas en llegar a Barcelona el jueves. "Estaré en mi casa a las nueve y media de la mañana, por lo que podré descansar, entrenar por la tarde y estar a tope en el Bernabéu", dijo ayer poco antes de viajar.
