Sólo 65 españoles declaran a Hacienda un patrimonio de más de 30 millones

Sólo 65 ciudadanos declaran en España tener un patrimonio superior a los 30 millones de euros, según las estadísticas oficiales sobre el impuesto de patrimonio, hechas públicas por primera vez por la Agencia Tributaria sobre los datos de 2003. El total de ciudadanos que declaran su patrimonio se cifra en 895.950, el 4,3% del total que hacen el IRPF, y el importe declarado asciende a 482.531 millones. La comunidad en la que más patrimonio se declara en cifras absolutas es Cataluña, con el 25% del total. Los bienes preferidos por las grandes fortunas son las acciones.

El impuesto de patrimonio grava la posesión de capital inmobiliario (excepto la vivienda habitual hasta 150.000 euros), el mobiliario (acciones, seguros, rentas), así como bienes suntuarios (joyas, vehículos, objetos de arte, etcétera). La recaudación del impuesto del patrimonio está completamente cedida a las comunidades autónomas. Por obligación personal, están sujetos a declarar aquéllos cuya base imponible resulte superior a los 108.182,18 euros o cuando el valor de los bienes y derechos exceda 601.012,1 euros, mientras que la obligación real de contribuir (no residentes) no está afectada por estos límites.

En 2003, los datos más recientes que se disponen, presentaron esta declaración 895.950 personas -apenas representan el 4,3% de los declarantes de Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF)- por un patrimonio total de 482.531 millones de euros.

Por tramos de base imponible, la inmensa mayoría de los contribuyentes (el 88,7%) declara poseer un patrimonio de entre 120.000 euros y 1,5 millones de euros, mientras que sólo el 8,5% de las declaraciones se encuentra en los tramos menores de 120.000 euros. El 2,7% restante declara en los tramos mayores de 1,5 millones de euros, aunque supone un 21% del total de la base imponible declarada.

En cuanto a las preferencias de ahorro, las grandes fortunas optan por el capital mobiliario (acciones, bonos, depósitos o deuda pública), donde concentran el 66,4% de sus bienes, mientras los inmuebles tienen un peso del 24,2%. No obstante, hay que tener en cuenta que el Impuesto de Patrimonio no afecta a la vivienda habitual siempre que esté valorada en menos de 150.000 euros.

Entre los que compran bienes suntuarios apenas unos cuantos se decantan por el arte y las antigüedades, que representa el 9% de lo declarado, frente al 91% que prefieren joyas, pieles, embarcaciones y aviones.

Por comunidades, Cataluña es la que más patrimonio declara, el 25% del total, seguida de Madrid (17,9%), Comunidad Valenciana (11,5%) y Andalucía (9,2%). No obstante, los ciudadanos más ricos, de acuerdo con la cuota que aportan, son los madrileños, con una media de 1.916 euros por declarante, seguidos de los cántabros (1.492 euros), los ceutíes (1.257 euros), catalanes (1.244 euros) y murcianos (1.205). Todos ellos pagan por encima de la media nacional, que es de 1.214,9 euros.

Por otra parte, Madrid, Andalucía y Cantabria fueron las comunidades que más crecieron el año pasado, según cálculos recogidos en el último número de los Cuadernos de Información Económica que edita la Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas). El estudio, elaborado por Julio Alcaide Inchausti y Pablo Alcaide Guindo, mide el avance en función del valor añadido bruto (VAB), equivalente al valor de la producción menos el coste de los bienes y servicios precisos para generarla, bruto de impuestos. Según esta medida, Madrid creció un 4,11% en 2005, Andalucía un 3,72% y Cantabria un 3,63%.

Baleares crece menos

En el otro polo, Baleares fue la autonomía que menos pujanza registró, ya que su VAB sólo avanzó un 2,37%. Asturias (2,89%), Castilla y León (2,94%) y Aragón (3%) fueron las siguientes comunidades de más débil crecimiento. Según el estudio de Funcas, todas las autonomías menos seis -La Rioja, País Vasco, Extremadura, Aragón, Navarra y Castilla y León- se anotaron el año pasado un mayor crecimiento que en 2004. La economía española creció un 3,42% en 2005, según Funcas. La construcción fue el principal motor, al aportar una tasa de crecimiento del 5,2%, muy por encima de otros sectores. Su contribución fue destacable en Murcia, Andalucía, Madrid, Cataluña, País Vasco y Castilla-La Mancha.

En cuanto a la convergencia con Europa, ocho comunidades superaron la media europea en términos de renta interior por habitante en poder de compra: País Vasco, Navarra, Madrid, Baleares, Cataluña, Aragón, La Rioja y Castilla y León. Por el contrario, murcianos y andaluces no llegan al 70% de la media de la UE.