Distinguidos veteranos
La tercera jornada del festival itinerante Wintercase 2005 trajo a Madrid a dos formaciones que tienen en común la experiencia y las ganas de comenzar nuevas e inciertas aventuras; la una española y la otra británica, las bandas Clovis y The Tears tuvieron que apechugar con la ausencia por motivos clínicos de Kaiser Chiefs, también estaban anunciados y que suspendieron a última hora.
Comenzaron, pues, Clovis, proyecto de la pareja compuesta por Fino Oyonarte, bajista de Los Enemigos y productor de renombre en el ámbito indie, y la vocalista Cristina Plaza. Con un disco de debut, titulado Respira, en la calle y una lluvia de parabienes por parte de los medios especializados, Clovis presentaron en vivo el álbum junto a una más que correcta banda de acompañamiento para dotar de consistencia a unos temas deudores de Yo la tengo, Nada Surf y, como es natural, Velvet Underground.
The Tears y Clovis
The Tears y Clovis. Sala Divino Aqualung. Madrid, 19 de noviembre.
Recientemente pasados al castellano, Clovis demostró con canciones como Metamorfosis, Ningún lugar y 1975 que están dispuestos a hacerse un sólido hueco en el panorama del rock español de ahora.
En cuanto a The Tears, esta formación británica de nuevo cuño volvió a reunir al vocalista Bernard Butler y el guitarrista Brett Anderson, ambos ex Suede y peleados durante años. Esta reunión ha dado como fruto un disco, Here comes The Tears, y unos conciertos en directo en los que la guitarra sangrante de Anderson y el emocionado y elegante modo de cantar de Butler dan sentido a los conceptos melodramático y melancólico en música pop.
Primitivos e intensos, The Tears ofrecieron su nuevo material -The ghost of you, A love as strong as death o la coreable Lovers-, en el que resucitan y dan vigencia a la idea inicial de los primitivos Suede: otra vuelta de tuerca al británico glam rock. The Tears han renunciado a aquella puesta en escena más asequible de los Suede posmarcha de Anderson y a aquella megalomanía estética que destilaban discos como Dog man star, y han apostado más por la crudeza.