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Atacados con cócteles molotov los juzgados de la localidad navarra de Tudela

El Ayuntamiento de Pasaia (Guipúzcoa) fue asaltado anoche

La violencia callejera de baja intensidad no acaba de apagarse en el País Vasco y Navarra. Esta noche, varios desconocidos atacaron la puerta de los juzgados de la localidad navarra de Tudela con tres artefactos incendiarios, de los que sólo dos llegaron a explotar, causando "daños mínimos".

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La Delegación del Gobierno en Navarra ha explicado esta mañana que el suceso se registró sobre las dos y media de la madrugada, cuando desconocidos lanzaron cóckteles molotov contra la puerta de los juzgados, en el número 4 de la calle Pablo Sarasate de Tudela. Los artefactos estaban confeccionados de manera casera, con tres botellines de cristal que contenían un líquido inflamable de baja concentración. Los especialistas de la Policía Nacional interpretan que se trata de gasóleo.

Dos de los botellines ardieron y mancharon "levemente" la acera y las escaleras de acceso al inmueble, mientras que el tercero no llegó a incendiarse.

Las mismas fuentes señalaron que el Cuerpo Nacional de Policía no descarta, por la similitud de los botellines incendiarios, que los autores de estos hechos sean los mismos que los del ataque contra los juzgados de Tafalla el pasado 17 de septiembre.

En nombre del Gobierno, la delegación rechazó estos hechos como "condenables, especialmente por perturbar la pacífica convivencia de la sociedad tudelana, navarra y española" y los consideró "estériles porque no van a amedrentar ni condicionar a ningún agente político, social o económico, como tampoco a ninguna institución, incluidas las judiciales".

Ayer, un grupo de violentos asaltó a las siete de la mañana el Ayuntamiento de Pasaia, en Guipúzcoa, y provocó cuantiosos daños en el interior, fundamentalmente en el salón de plenos.

Halladas una troqueladora y matrículas de ETA en Francia

En otro orden de las cosas, unos cazadores encontraron ayer en Las Landas (suroeste de Francia) una troqueladora y un centenar de placas de matriculas atribuidas a ETA.

Esos materiales estaban ocultos en dos bolsas de basura enterrados en una zona boscosa de la localidad de Labenne, cerca de Marais d'Orx, a una treintena de kilómetros al norte de Bayona, ha precisado una fuente de la investigación.

Al parecer, las placas encontradas ayer están "ligadas" a un robo perpetrado el 15 de marzo pasado por un presunto comando de ETA en la sociedad Superplaques de la localidad de Replonges, a unos 70 kilómetros de Lyon.

En ese atracó, en el que hubo una toma de rehenes y que se produjo siete días antes del anuncio de alto el fuego de ETA, tres presuntos etarras se hicieron con un botín de entre 10.000 a 20.000 matrículas y material para troquelarlas.

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