Detenido en EE UU un español por el secuestro de dos empresarios en Georgia
Había pedido asilo como disidente cubano
Un grupo de agentes del FBI en colaboración con la oficina española de Interpol detuvieron el pasado 17 de abril en Las Vegas (Nevada, EE UU) a Arnaldo Orta Luzardo, ciudadano español buscado por la Audiencia Nacional por su implicación en el secuestro de los empresarios Francisco Rodríguez y José Antonio Tremiño en Georgia en noviembre de 2000. El secuestro se resolvió 13 meses después tras el pago de un rescate por sus respectivas familias.
Orta Luzardo, que también tiene la nacionalidad cubana, esperaba en el momento de su arresto un permiso de residencia estadounidense tras haber pedido asilo político en Puerto Rico, donde llegó por mar con un grupo de inmigrantes cubanos.
Dos razones fundamentales hicieron sospechar a la policía de su implicación como cómplice o cooperador necesario. Orta Luzardo, que actuaba bajo el sobrenombre de Alejandro Marcoso o Álex el cubano (así lo conocían los secuestrados) era socio de Rodríguez en Ucrania. En el momento del secuestro, ambos mantenían pésimas relaciones ya que el empresario le reprochaba los malos resultados de la compañía (Geomadera) en ese país.
Sin embargo, participó activamente en la organización del viaje de Rodríguez y Treviño a Georgia. Ambos durmieron en el hotel London, una especie de residencia para los directivos y trabajadores de la compañía en Tiblisi, la capital.
La policía cree que Orta (casado con una georgiana que reside en Alicante) pudo informar a los secuestradores de los movimientos de los empresarios. El día del secuestro debió acompañarlos al aeropuerto, pero no lo hizo alegando que se había quedado dormido. Los delincuentes los sacaron de su coche cuando se disponían a tomar el avión.
Pero además, durante su cautiverio -en el que permanecieron largas temporadas atados del cuello y llegaron a privarles de agua y comida- Orta actuó como intermediario entre las familias de los secuestrados y sus raptores. El socio de Rodríguez llegó a recibir cantidades importantes en concepto de rescate de sus esposas para desaparecer sin dejar pista poco tiempo después.
El 17 de abril volvió a aparecer en Las Vegas después de haber pasado una larga temporada en Nueva York bajo la protección de un abogado. Los investigadores creen que pudo haber huido a esa ciudad al sentirse perseguido por los agentes.
