Férreo silencio del sucesor del gobernador militar destituido por unas declaraciones
El nuevo gobernador militar de Guipúzcoa, el general Ramiro Guerra Gordo, se mostró ayer muy reservado ante los medios informativos en el acto de toma de posesión de su cargo, celebrado al mediodía en el acuartelamiento de Loyola, en San Sebastián.
De antemano, los ayudantes del nuevo gobernador militar advirtieron a los informadores presentes en el acto que el general únicamente respondería a preguntas planteadas previamente por escrito, y el propio gobernador militar confirmó posteriormente que no estaba dispuesto a dejarse atrapar en una entrevista espontánea y correr la suerte de su antecesor en el cargo, el general Antonio López Losada, que fue destituido fulminantemente por el ministro de Defensa, Narcís Serra, por afirmar que los militares respetarían cualquier decisión adoptada por el Gobierno surgido de las urnas.
El general Ramiro Guerra se limitó a decir que estaba muy satisfecho por su nombramiento, que la comunidad autónoma vasca es igual que cualquier otra y que hay preguntas que no pueden contestarse y otras que conviene no contestar.
Ramiro, Guerra explicó las razones de su cautela con el ejemplo: "Un financiero no contesta a preguntas que pueden significar su bancarrota".
