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La mayor tragedia de metro en España

La Generalitat advierte de las consecuencias judiciales de no denunciar el riesgo del metro

Siete heridos siguen ingresados tras recibir el alta un hombre de 26 años

El portavoz del Gobierno valenciano, Vicente Rambla, ha advertido hoy de las "consecuencias judiciales" que puede tener el conocer "la posible existencia de un riesgo evidente para la seguridad de las personas" en el metro de Valencia y no haberlo denunciado hasta después del accidente del pasado lunes, en referencia a las críticas vertidas por los sindicatos, de las que el Gobierno regional asegura no haber tenido conocimiento previo. Mientras tanto, siete personas que resultaron heridas en el accidente de metro de la Línea 1 de Valencia permanecen ingresadas en cuatro hospitales de la ciudad, después de que un hombre de 26 años que estaba hospitalizado en el Doctor Peset haya recibido hoy el alta médica.

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Rambla, que ha hecho estas declaraciones tras el pleno del Ejecutivo valenciano que aprobó el anticipo de ayudas para los familiares de las 42 víctimas mortales y los heridos, ha asegurado que al Gobierno de Francisco Camps no le va "a temblar el pulso en relación a las acusaciones que de forma gratuita se puedan verter sobre este asunto". "No podemos consentir que se amedrente a ese conjunto de personas que durante años ha circulado y sigue circulando con total seguridad" en el metro de Valencia, ha añadido. El conseller ha afirmado que, más allá "de valoraciones, que son legítimas", no pueden permitir que "se siembren dudas permanentes ante infraestructuras que han sido y son seguras" y lamentó que exista "gente con pocos escrúpulos intentado buscar beneficio político en todo momento".

La línea 1 del metro, ha insistido, es una infraestructura que reunía "todos los requisitos de seguridad", igual que sucede "con los coches", pero ante "un error humano" estos dejan de funcionar, como pasa "todos los días en las carreteras" y, según su razonamiento, "no por ello se pide todos los días la dimisión del director general de Tráfico, ni que se llene el país de autopistas". Ante el hecho de que algunos de los paros convocados por los sindicatos del metro tuvieran la seguridad entre sus reivindicaciones, Rambla ha afirmado que esta cuestión "forma parte de la reivindicación lógica y legítima de los sindicatos", como ocurre en otros ámbitos como el sanitario.

Una comisión desde tiempos de Lerma

Preguntado por las responsabilidades políticas del siniestro, ha defendido que cuando es consecuencia de un "error que ha tenido trágicas consecuencias, no se puede considerar negligencia ni irresponsabilidad", por lo que no se puede esperar que una persona en concreto asuma la culpa. En todo caso, ha recordado que el actual Gobierno valenciano "no ha inventado ni esa línea, ni esa curva", en alusión al trayecto en el que se produjo el siniestro, y ha añadido que si se quiere "conocer en todo su extensión lo ocurrido es lógico que se investigue desde los que en un principio tuvieron alguna relación con esa línea". "La comisión de investigación estamos dispuestos a que se haga, pero desde el principio, desde el día que se inauguró por parte del entonces ministro de Transporte, José Barrionuevo, y por parte del que era en aquel momento president de la Generalitat, Joan Lerma", ha aclarado.

Sobre los heridos y, en contra de lo que se había informado inicialmente, Violeta Rius, la niña de 11 años convertida en imagen de la tragedia, continúa ingresada en el hospital de La Fe pero su pronóstico es leve. En ese mismo hospital murió ayer su madre, Carmen Garrote, de 42 años, que se convirtió en la víctima 42 del accidente. Así, todavía quedan siete heridos ingresados en los hospitales Clínico Universitario, La Fe, Doctor Peset y General de Valencia. Según ha informado el departamento de Sanidad de la Generalitat Valenciana, sólo uno de los pacientes se encuentra es muy grave, mientras que el pronóstico es de grave en otros cinco pacientes y uno leve.

En el Hospital Clínico permanecen ingresados dos pacientes: un varón de 29 años, residente en la población de Picanya con pronóstico grave y una mujer de 40 años, vecina de Torrent, con pronóstico grave. Otros dos heridos están ingresados en el Hospital La Fe: la niña de 11 años de Torrent y una mujer de 30 que reside en Burjassot. Su es grave pero evoluciona favorablemente. En el Hospital Doctor Peset permanece ingresado un paciente: una mujer de 44 años, residente en el municipio de Torrent con pronóstico muy grave. Por último, en el Hospital General permanecen ingresados dos mujeres de 46 y 41 años de las poblaciones de Real de Montroi y Picanya con pronóstico grave.

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