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La política de extranjería

El PP relaciona las "avalanchas" y las mafias de inmigrantes con la delincuencia

Caldera recuerda a Acebes que 2003 fue el año de mayor llegada de extranjeros en patera

El PP vuelve a relacionar inmigración y delincuencia. Ángel Acebes, secretario general de los populares, aseguró ayer durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso que las "avalanchas" de inmigrantes "han convertido en un coladero" las fronteras, algo que "están aprovechando las bandas de delincuentes para introducirse en España". "La delincuencia que se está produciendo en las casas tiene que ver con las bandas que trafican con seres humanos", señaló. En contraposición, Josep Antoni Duran Lleida (CiU) aseguró que "nada tiene que ver el fenómeno de la inmigración con el de la delincuencia".

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El PP había concentrado la sesión de control en torno a la inmigración. Mariano Rajoy había previsto preguntar al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, sobre la cuestión, pero el líder de los populares se ausentó para asistir a los funerales del padre de su diputado Javier Arenas. Le sustituyó el secretario general, Ángel Acebes. Pero no fue Zapatero quien le contestó, sino el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera.

Acebes reprochó al presidente que no le respondiese, y vio en ello una prueba de que la inmigración "ha generado un gravísimo problema y prefiere salir corriendo a dar la cara en el Congreso de los Diputados". Caldera le aseguró que la política en este asunto es la adecuada; entre otras cosas porque, por primera vez, ha sido consensuada con todos los sectores y todos los partidos, salvo con el PP.

El secretario general de los populares desgranó críticas por la política de regularización, recordó los asaltos a las fronteras de Ceuta y Melilla, el verano pasado, y las actuales "avalanchas en Canarias". A partir de ahí, preguntó a Caldera: "¿Pero, sabe qué es lo más grave?". Y se respondió él mismo de esta manera: "Que estas avalanchas han convertido en un coladero nuestras fronteras, y lo están aprovechando las bandas de delincuentes para introducirse en España. La delincuencia que se está produciendo en las casas tiene que ver con las bandas de delincuentes que trafican con seres humanos, los robos con violencia, los secuestros exprés, los homicidios". Y continuó: "¡Claro que tiene que ver!, y, por lo tanto, hay que exigir políticas eficaces que acaben con este problema que cada vez preocupa más a los ciudadanos. Mientras tanto, este Gobierno, absolutamente desbordado, hace el ridículo, como usted, diciendo que toda Europa iba a copiar su política".

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Caldera replicó que se trata de "un problema de orden mundial" -lo que provocó risas entre los diputados populares-, y que es necesario incrementar "la ayuda al desarrollo". El ministro explicó que ha multiplicado por dos la ayuda a África, y por tres al África Subsahariana; y recordó a Acebes que 2003, siendo él ministro del Interior en un Gobierno del PP, fue el año "que más entradas ilegales por medio de pateras hubo en España, más de 20.000 personas". El ministro reconoció a continuación: "Este año llevamos 8.000".

Antes, Duran Lleida, como portavoz de CiU, había preguntado al presidente del Gobierno por el incremento de delincuencia por parte de bandas organizadas con conexiones internacionales. Duran dijo que la inmigración "más llamativa humanamente y sin duda la más problemática" es la que llega por Canarias, pero, añadió, "no olvidemos que también a través del Pirineo continúa habiendo entrada de inmigración". A renglón seguido, el portavoz del Grupo Catalán añadió: "Es importante que ningún ciudadano tenga la sensación de identificar, porque nada tiene que ver el fenómeno de la inmigración con el fenómeno de la delincuencia".

Además de Acebes, el portavoz del PP en el Congreso, Eduardo Zaplana, preguntó también por la inmigración, y llegó al ataque personal al ministro, al asegurar que cuando Zapatero formó Gobierno cometió "uno de los principales errores". "Como no quería", dijo el portavoz popular, "hacer a Caldera vicepresidente tuvo la peor ocurrencia de todas: entregarle a cambio inmigración".

Antes, la diputada del PP Mercedes Roldós le dijo a Caldera que él y el Gobierno "han abierto las fronteras a las mafias que trafican con seres humanos, sin límites, sin control y sin sentido común", y acusó al Gobierno de mentir "al asegurar que no había barcos nodriza, aunque el señor Zapatero le ha dicho a don Paulino Rivero, portavoz de Coalición Canaria, que el Gobierno tiene fotos aéreas con barcos nodriza, con cayucos".

Precisamente, el portavoz del Grupo Canario le reprochó a Caldera que, en su reciente visita a las islas criticase la gestión del Gobierno insular sobre la inmigración. Rivero exigió que lleguen los fondos necesarios para atender a los desplazados. Caldera le respondió que gracias al acuerdo sobre financiación sanitaria que alcanzó el Gobierno con las comunidades autónomas, dentro de "pocos días" llegarán a Canarias esos recursos.

Al comienzo de la sesión, Zapatero respondió una pregunta del diputado de Izquierda Verde (IV), Joan Herrera, que había expresado la preocupación de su grupo "por las garantías con que se traslada a los inmigrantes" y por "los excesos de demagogia".

Zapatero, en su respuesta, agradeció "el ejemplar comportamiento de la sociedad canaria, de las organizaciones no gubernamentales, de los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, de Salvamento Marítimo" y de todos los que trabajan ante "la presión migratoria".

Recordó que desde 2002 funciona un convenio que supone "solidaridad con Canarias" para que los inmigrantes que no puedan ser repatriados sean trasladados a la Península, y que desde 2005 se aplica un protocolo para la atención humanitaria.

El ministro de Trabajo, Jesús Caldera, y el secretario general del PP, Ángel Acebes, en la sesión de control.
El ministro de Trabajo, Jesús Caldera, y el secretario general del PP, Ángel Acebes, en la sesión de control.LUIS MAGÁN

POLÉMICA SOBRE LA INMIGRACIÓN EN EL CONGRESO DE LOS DIPUTADOS

Ángel Acebes acuso al Gobierno de que "las avalanchas" de inmigrantes han convertido "en un coladero nuestras fronteras" y lo están aprovechando las bandas de delincuentes para introducirse en España.

Jesús Caldera recordó a Acebes que 2003, siendo él ministro del Interior, fue el año en que se produjeron "más entradas ilegales" en pateras en España, "más de 20.000 inmigrantes", señaló el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales.

Paulino Rivero, de Coalición Canaria, exigió al Gobierno que lleguen los fondos necesarios para atender a los inmigrantes desplazados.

Josep Antonio Duran Lleida, portavoz de CiU, recordó que los inmigrantes también llegan por los Pirineos, pero recalcó que no hay que identificar inmigración con delincuencia.

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