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El proceso para el fin del terrorismo

Rajoy afirma que "es imposible ganar un proceso de paz irresponsable e inmoral"

El líder de la oposición acusa a Zapatero de ceder ante ETA y de dividir para excluir al PP

"España", "el proyecto nacional de España", esa "gran nación europea"... Éstas fueron las palabras que más repitió ayer Mariano Rajoy en un discurso que tituló La hora de España y con el que dijo dirigirse a la "España sensata y laboriosa" que comparte con él "la ambición de olvidar lo antes posible lo que han significado estos años de Gobierno de Zapatero". Lo peor de esos años, avisó el líder de la oposición, está aún por llegar: será la "negociación y cesión" ante ETA. "Uno puede apuntarse a eso, al proceso de paz, pero es una enorme irresponsabilidad". Según Rajoy, además, es "ilegal", "inmoral" e "ineficaz", porque "quien negocia pretende ceder, y, en esas circunstancias, pierde siempre". Y sentenció: "Es imposible ganar".

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Rajoy argumentó que "es imposible ganar" en esta negociación con ETA porque, a su juicio, la puesta en marcha del denominado "proceso de paz" ha dado alas a una banda terrorista que estaba, según él, acorralada por la aplicación del Pacto Antiterrorista, "una regla de juego muy eficaz". Aquel pacto, dijo, "debilitó mucho a ETA, muchísimo, como nunca". El motivo, según él, fue que "la única salida que la sociedad española le daba a ETA era dejar de matar". Y ahora, al conceder a ETA la cualidad de parte en una negociación con el Gobierno, el Estado se enfrenta "a un problema de eficacia", porque "quien negocia, pretende ceder". Y, por tanto, "pierde siempre. Es imposible ganar".

Rajoy subrayó que él y su partido van a "seguir dando la batalla" para "que siga en vigor y se cumpla la Ley de Partidos"; para que las fuerzas de seguridad y la Justicia "sigan cumpliendo su función"; para que no se cambie "el marco jurídico en el País Vasco", y, sobre todo, para que ninguna modificación legal de esas características se decida "en una mesa de partidos absolutamente ilegal". Lo peor, según Rajoy, es que "lo que decida esa mesa de partidos tengan que respetarlo (como dicen algunos) los Estados español y francés".

Mesa de partidos

Antes y después de detallar su rechazo rotundo a la negociación con ETA, sobre todo si incluye como potencial contrapartida un cambio del marco jurídico en el País Vasco decidido en una mesa de partidos, Rajoy se comprometió a poner el freno y la marcha atrás en "el cambio brutal" en el modelo de Estado que, "sin consultar a los españoles, se ha impuesto a todos por un Gobierno irresponsable que jamás planteó en su programa electoral nada de lo que está en marcha en estos momentos". Lo hará porque, según anunció, el programa electoral con el que él competirá en las próximas elecciones generales defenderá "la unidad de España, la soberanía nacional, la necesidad de que haya un Estado viable, con competencias, con funciones, con recursos y libre, sin condicionantes".

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Rajoy puso como ejemplo la reforma constitucional ahora en marcha en Alemania, por el Gobierno de la CDU y el SPD liderado por Angela Merkel, con el objetivo de "desmontar un modelo que se había convertido en una fuente de inmovilismo, debido al poder de veto de las regiones". Avisó, en todo caso, de que "no se trata de eliminar el Estado de las autonomías, sino de evitar la mutación confederal a la que nos aboca el modelo pactado por Zapatero y los nacionalistas" catalanes y, en el futuro más próximo, también vascos.

"Nuestro programa electoral en las próximas elecciones generales apelará directamente al pueblo español en estos asuntos, porque únicamente el pueblo español tiene derecho a decidir sobre su futuro colectivo", afirmó.

Rajoy reiteró su tesis de que "una clase política" -la catalana, con el respaldo de Zapatero- ha "suplantado la España autonómica por otra confederal" con el solo respaldo "del 35% del censo" catalán. Y remachó que Zapatero ha hecho todo esto porque "juega a dividir para excluir" al PP y a los ciudadanos que ese partido representa.

José María Aznar y Mariano Rajoy, durante la clausura del curso de verano de FAES en Navacerrada.
José María Aznar y Mariano Rajoy, durante la clausura del curso de verano de FAES en Navacerrada.EFE

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