_
_
_
_
_

Un consejero de la Embajada española escucha las quejas de Pekín por las imputaciones de genocidio

El Gobierno chino critica que la justicia española investigue la ocupación de Tíbet y el 'caso Falun Gong'

La acumulación en la Audiencia Nacional de dos causas que implican a las autoridades chinas en sendos presuntos casos de genocidio, en Tíbet y contra el movimiento Falun Gong, ha colmado la paciencia del Gobierno de Pekín, que ha pedido a la Embajada que le envíe a un representante para quejarse de la justicia española. En principio, se publicó que Pekín había convocado al embajador pero, finalmente, parece que la queja no es tan formal y basta con enviar a un consejero.

Más información
Pekín convoca al embajador español para quejarse de las imputaciones de genocidio

El consejero de prensa de la Embajada española en Pekín, Gregorio Laso, será que acuda a la cita, esta mañana. Explicó que el hecho de que se llame a un consejero manifiesta que "el nivel de la convocatoria es inferior". El interlocutor de consejero español podría ser el jefe del departamento de Europa del Ministerio chino de Asuntos Exteriores, Kong Quan.

Las investigaciones de la Audiencia Nacional relacionadas con China son las que han suscitado la tensión con el Gobierno de ese país. En los últimos días, el juez Ismael Moreno ha comenzado a practicar diligencias en el caso del presunto genocidio de Tíbet y el Tribunal Supremo español ha ordenado a la Audiencia investigar el presunto genocidio y torturas a miembros del movimiento Falun Gong.

Ya el pasado martes, el Gobierno chino declaró que la investigación sobre el presunto genocidio cometido por las autoridades chinas en Tíbet en los años ochenta y noventa es una interferencia en los asuntos internos de su país, al tiempo que calificó de "absoluta mentira" los hechos que se imputan a Pekín. "Las denuncias del llamado genocidio en Tíbet son una difamación total, una absoluta mentira", declaró el portavoz del Ministerio chino de Exteriores, Liu Jianchao.

Fuentes del Ministerio español de Asuntos Exteriores resaltaron ayer que el Gobierno "mantiene un escrupuloso respeto por las decisiones judiciales y espera que este asunto se pueda resolver de una forma comprensible para todas las partes".

Miembros de Falun Gong protestan ante el consulado chino de Barcelona en septiembre de 2005.
Miembros de Falun Gong protestan ante el consulado chino de Barcelona en septiembre de 2005.CARMEN SECANELLA

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_