_
_
_
_
_

Blair baraja controlar a los niños conflictivos incluso antes de nacer

Críticas a las nuevas propuestas laboristas contra la exclusión social

El primer ministro británico, Tony Blair, presentará hoy una serie de medidas para luchar contra la exclusión social. Se espera que el líder laborista profundice en algunas de las ideas que lanzó de manera preliminar la semana pasada y que provocaron cierta polémica. Entre las propuestas barajadas por Blair figura la de que el Gobierno intervenga incluso antes del nacimiento de un niño que, debido a su entorno familiar, tiene muchas posibilidades de acabar viviendo en la marginación, para evitar que se convierta, al crecer, en "una amenaza para la sociedad".

Esa propuesta fue recibida con cierta prevención por algunas organizaciones sociales y con abierta hostilidad por políticos como el veterano Tony Benn, ministro laborista en los años sesenta y setenta y convertido ahora en una de las voces más críticas del nuevo laborismo. "La idea de identificar a los niños problemáticos en el feto es eugenesia, el tipo de cuestión de la que hablaba Hitler", dijo Benn.

Clare Tickell, directora de NCH, una organización dedicada a ayudar a los niños con problemas, advirtió: "Una intervención temprana puede ayudar a las familias a romper el ciclo de exclusión, pero se ha de hacer de manera que no estigmatice. El Gobierno debe tener en cuenta que las familias necesitan ayuda, pero no ser castigadas".

Clare Tickell se refería en concreto a la idea planteada por Tony Blair de retirar ayudas sociales a los padres que se nieguen a recibir asesoramiento del Gobierno para educar a sus hijos.

El llamado "comportamiento antisocial" es uno de los grandes problemas del Reino Unido y el Gobierno ya lanzó en enero un ambicioso plan para combatirlo.

El 2% de la población

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

El primer ministro ya se refirió entonces a medidas de castigo para las familias más conflictivas, como la retirada de ayudas a la vivienda o incluso el traslado de las familias más conflictivas y reincidentes. Algunos expertos denunciaron entonces que eso trasladaría el problema a otro lugar pero no lo solucionaría.

Las medidas tienen como objetivo el 2% de la población británica que no consigue salir de la exclusión social, familias que el Gobierno define como "de alto riesgo, alto perjuicio y alto coste" para la sociedad.

Los niños con más problemas, que forman el 5% de la población infantil, tienen 100 veces más posibilidades de tener algún día problemas de conducta desordenada, contacto con la policía, consumo de cannabis, alteraciones del comportamiento o abuso del alcohol.

El Reino Unido posee la tasa más alta de Europa occidental de embarazos de adolescentes.

Tony Blair, en San Francisco (California) el pasado jueves.
Tony Blair, en San Francisco (California) el pasado jueves.REUTERS

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_