Hugo Chávez anuncia la creación de un nuevo impuesto a la extracción petrolera
El Ejecutivo pedirá a la Asamblea Nacional la modificación de la Ley de Hidrocarburos para incluir el nuevo impuesto tributo
El presidente venezolano, Hugo Chávez, ha anunciado que su Gobierno aplicará un "nuevo impuesto a la extracción" de crudo para aumentar los ingresos nacionales en el sector petrolífero. "Vamos a crear un nuevo impuesto petrolero llamado "impuesto a la extracción. Están ganando mucho dinero las empresas que están sacando petróleo en Venezuela", ha afirmado Chávez en su dominical programa de radio y televisión Aló Presidente. Hugo Chávez toma esta decisón tras la reunión que ha mantenido con los presidentes de Brasil, Argentina y Bolivia en Puerto Iguazú donde analizaron la decisión del Gobierno boliviano de nacionalizar los hidrocarburos.
Chávez no ha precisado de cuánto será el nuevo "impuesto a la extracción", pero ha dicho que su cobro reportará al país "varios cientos de millones de dólares este año" y "más de 1.000 millones de dólares" en el 2007. El nuevo impuesto a la extracción lo pagarían las llamadas "empresas mixtas", en las que la estatal Petróleos de Venezuela S.A (PDVSA) tiene la mayoría de las acciones.
El gobernante izquierdista también ha anunciado que aumentará del 34 al 50% el Impuesto sobre la Renta (ISLR) a las empresas que extraen crudo en la Faja Petrolífera del Orinoco, que tiene reservas cifradas en 235.000 millones de barriles, según datos oficiales. Precisamente, el Ejecutivo pedirá a la Asamblea Nacional (AN), de 167 miembros, todos oficialistas, la modificación de la Ley de Hidrocarburos para incluir el nuevo impuesto tributo "a la extracción" y también el aumento del ISLR a las empresas que operan en la Faja del Orinoco.
Sistema de explotación
Chávez ha defendido que la modificación de esta Ley es necesaria porque "infiltrados antichavistas" permitieron que la actual Ley de Hidrocarburos vigente, del 2001, accediera a que las empresas que operan en la Faja pagaran un 34% de ISRL, tasa menor al 50% que se aplica a este tipo de explotaciones en el resto del país.
Esta Ley vigente también ha eliminado los "convenios operativos" suscritos por PDVSA y 22 trasnacionales en la década de los 90 para sustituirlos por las nuevas "empresas mixtas", constituídas por la PDVSA, empresas extranjeras y locales que tendrán una duración de 20 años y en las que la estatal venezolana tiene al menos un 60% accionarial.
Entre las trasnacionales que se acogieron a esta nueva nueva fórmula están la hispano-argentina Repsol YPF, China National Petroleum, la británica BP, la estadounidense Chevron y la brasileña Petrobras.
Sin embargo,la francesa Total y la italiana ENI no aceptaron el nuevo esquema de explotación de crudo, por los que el Estado asumió el control de los campos que controlaban y que sumaban una producción de unos 80.000 barriles diarios de crudo, según datos oficiales. La estadounidense Exxon Mobil tampoco aceptó asociarse con PDVSA y en diciembre pasado vendió a Repsol su participación de un 25% en un convenio operativo que explotaba un campo con producción de 15.000 barriles diarios.
