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El IRA se compromete a colaborar con la policía en el Ulster

El grupo armado respeta el proceso de paz

El décimo informe de la comisión independiente que controla la actividad paramilitar en Irlanda del Norte confirma el compromiso del IRA con la vía pacífica, y certifica que no ha habido actividad delictiva dirigida o aceptada por la dirección del grupo terrorista, y que ésta ha dejado de ordenar el acopio de información sobre objetivos posibles y rivales políticos. Quizá aún más significativo, asegura por primera vez que la cúpula del IRA "ha aceptado la necesidad de comprometerse con las labores policiales", uno de los puntos clave para la completa normalización de Irlanda del Norte.

El informe publicado ayer supone un espaldarazo para las intenciones del Gobierno británico de abrir negociaciones para restablecer la autonomía, suspendida desde octubre de 2002. Londres restablecerá parcialmente las funciones de la Asamblea de Stormont el mes que viene, aunque nadie espera que el líder del Partido Unionista Democrático (DUP), el carismático reverendo Ian Paisley, acepte formar Gobierno con el Sinn Fein hasta diciembre próximo, como muy pronto. Para entonces, hará ya más de un año desde que el IRA destruyó todos los arsenales que estaban bajo su control.

Aunque Paisley insistió ayer en que se haga pública la lista del armamento destruido por el IRA, tuvo también una reacción positiva al informe: "La política de la voz unida de los unionistas insistiendo en que ha de cesar la criminalidad está teniendo efecto, y damos la bienvenida a ese efecto", dijo. Sir Reg Emey, líder de los unionistas moderados, declaró que el informe "continúa representando progresos", pero reclamó que el IRA devuelva el dinero que consiguió en el espectacular atraco al Northern Bank de Belfast, en vísperas de la Navidad de 2004.

También el ministro británico para Irlanda del Norte, Peter Hain, se felicitó de los progresos subrayados por el informe. Joe Brosnan, uno de los miembros de la comisión que ha elaborado el documento, señala: "Es el más positivo que hemos hecho hasta ahora en lo que respecta al IRA Provisional [como se conoce oficialmente a la rama predominante del grupo terrorista]".

El informe constata que sigue habiendo cierta actividad paramilitar, tanto por parte de grupos lealistas como por parte de disidentes republicanos, pero no por parte del IRA. También constata la existencia de actividades delictivas a cargo de miembros del IRA, pero subraya que se trata de actividades individuales que no cuentan ni con el respaldo ni con la connivencia de la cúpula de la organización.

Desde el punto de vista político, destaca la declaración de que "la dirección del IRA está comprometida a seguir la vía pacífica" y que "en los últimos tres meses, se ha intensificado el desmantelamiento del IRA como estructura militar". Sus miembros están siendo instruidos por la cúpula para reconvertirse en militantes políticos trabajando en la estructura del Sinn Fein, o al servicio de actividades comunitarias. No hay tampoco indicios de actividades ilegales de captación de fondos para el IRA, "aunque algunos miembros, incluidos algunos altos cargos (de manera diferenciada a la organización) siguen involucrados en actividades criminales, incluyendo delitos como el lavado de dinero, la extorsión, el fraude fiscal y el contrabando".

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Controversia

El informe destaca por primera vez que la directiva

"ha aceptado la necesidad de comprometerse con las labores policiales si eso persigue el objetivo del traspaso del servicio de policía y la justicia a una Asamblea y Gobierno de Irlanda del Norte". "Este asunto sigue provocando gran controversia sobre el terreno y hasta ahora aún no ha sido resuelto en el seno del IRA Provisional a pesar de la robusta discusión", puntualiza el texto.

La aceptación de la policía de Irlanda del Norte por los republicanos, que tradicionalmente la han visto como un instrumento al servicio del unionismo, es uno de los puntos clave para la completa normalización de la situación política en el Ulster.

Dos estudiantes caminan entre varias pintadas del IRA en Belfast.
Dos estudiantes caminan entre varias pintadas del IRA en Belfast.REUTERS

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