_
_
_
_
_

El director regional de Urbanismo autorizó planes redactados por sus socios inmobiliarios

Enrique Porto asegura que desconocía que algunos proyectos habían sido elaborados por sus familiares

Enrique Porto Rey, tras ser designado en diciembre de 2003 director general de Urbanismo de la Comunidad, subrogó sus contratos como arquitecto privado de planeamientos en municipios madrileños a una consultora suya -Plarquin-, cuyas acciones vendió entonces a socios en firmas del sector. Tanto Plarquin como empresa -ubicada en un edificio de Porto- como individualmente sus dueños (socios del alto cargo) han ido redactando planes sobre distintos municipios -con un equipo que incluía en ocasiones a un hermano y a una hija de Porto- que han sido presentados ante Urbanismo para su aprobación sin que el director general se inhibiera, según admitió a este diario.

Los dos principales compradores de las acciones de Plarquin son socios del alto cargo
Más información
Dimite el director general de Urbanismo de Madrid
"Ahora me inhibiré"

Porto es un arquitecto que en 2002 estaba inmerso, según su currículo, en la redacción de los planeamientos -globales, parciales o de detalle-, de varios municipios madrileños: Cobeña, Ciempozuelos, Moraleja de Enmedio, Camarma, Alcorcón, Leganés, Algete, Villanueva de la Cañada, San Martín de la Vega, Parla, Moralzarzal y la capital. Tras ser nombrado director general el 30 de diciembre de 2003, Porto cede sus contratos madrileños a la empresa Plarquin. No es que los consistorios, surgida su incompatibilidad, busquen un nuevo despacho de arquitectura, sino que es Porto quien lo designa. Y lo busca muy cerca: él mismo fundó Plarquin en 2000 con José María Fernández del Río, arquitecto y ex consejero en Caja Madrid del PP.

Al tiempo que subroga sus contratos en Plarquin, Porto formaliza su desvinculación. Este desmarque arranca en enero de 2003 con la venta de 50 acciones a Alejandro Arca Naveiro, arquitecto que trabajaba a sus órdenes, a quien designará como heredero de sus proyectos privados. El ya director de Urbanismo cierra su desenganche de Plarquin en enero de 2004: su esposa e hija ceden 200 acciones a José María Fernández del Río; y Porto y su esposa entregan otras 250 acciones a José Federico Bouzas. En total, por sus 500 acciones el director de Urbanismo y su familia reciben 3.000 euros. Su valor nominal. Porto, igualmente, regala a Plarquin la cesión de todos sus contratos. Sólo exige a su sucesor en la empresa que se haga cargo de su personal. Con ello, aparentemente, regala contratos de los que uno solo ya vale casi 12.000 euros.

Pese a tal desvinculación formal, hay varios hechos que siguen relacionando Plarquin con Porto. Los dos principales compradores de sus (450 de las 500 títulos enajenados) son socios suyos en otras empresas. Fernández del Río es socio, a partes iguales, en la empresa Fernández y Porto.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

El director de Urbanismo (con su esposa e hijos) posee 3.500 acciones. Las mismas que Fernández del Río, esposa e hijos. El objeto social de Fernández y Porto no deja de chirriar en manos de un director de Urbanismo: "Promoción urbanística en su más amplio sentido"; "solicitar y obtener concesiones administrativas de toda clase de aprovechamientos de servicios, de disfrute, de ocupación"; "la promoción de centros comerciales o hipermercados"... Sus activos valen más de un millón de euros. Porto la define como "una sociedad patrimonial que posee el edificio madrileño de José Silva, 14".

Fernández del Río, además, es socio de la esposa de Porto, en Elclansol, una inmobiliaria de la que forma parte Ricardo Ortega, cuñado del dirigente del PP, Luis Partida, alcalde de Villanueva de la Cañada. Pero Fernández del Río no es el único accionista de Plarquin que mantiene relaciones societarias con el alto cargo de la Comunidad. Bouzas, otro de los compradores de sus acciones, es socio suyo en la empresa Trienal, inmobiliaria que coadministra junto con Porto. Su sede es también la misma de Plarquin.

No sólo los dos principales dueños de Plarquin son socios de Porto. Existe un tercer nexo: Plarquin tienen sede en el edificio José Silva, 14, propiedad de la inmobiliaria que comparten Porto y Fernández del Río, y por la que paga un alquiler. Plarquin, por tanto, factura a una firma del alto cargo (Fernández y Porto). Y ambas comparten teléfono.

Todos los planeamientos urbanísticos iniciados o diseñados en municipios de la región por Porto o sus socios (personalmente o a través de Plarquin) han ido entrando poco a poco en la Consejería de Medio Ambiente para su aprobación a lo largo del mandato del director de Urbanismo. Porto se ha visto ya en la tesitura de inhibirse o dar su conformidad a proyectos que él mismo inició o que posteriormente remataron o realizaron sus socios. No es una hipótesis. Es un hecho que se repite: desde 2004 se han ido autorizando en Urbanismo planeamientos parciales de sectores redactados por el socio de Porto, Fernández del Río, a nombre de una empresa, Estudios de Planeamiento y Gestión Urbanística, Arquitectura e Ingeniería que tenía como sede la misma que la empresa del alto cargo: José Silva, 14 y su mismo correo, fernándezyporto@terra.es.

La documentación aportada en Urbanismo acreditaba que el equipo redactor dirigido por Fernández del Río estaba integrado por el hermano de Porto, Eduardo Porto Rey, su hija Genoveva Porto y su otro socio, José Bouzas. "Ningún funcionario me dijo que figuraban mi hija o mi hermano", alega Porto. Fernández del Río también ha sido redactor de otros dos planeamientos bendecidos por su socio y alto cargo: Brunete (SR-2 El Olivar) y el plan especial de redes de Villanueva de la Cañada.

Plarquin, paralelamente, ha redactado y visto autorizados planeamientos en Urbanismo -Moralzarzal, plan parcial sector S-1, Las Hachazuelas- con técnicos coincidentes con el anterior equipo. Esta empresa, incluso, veía conformado por el director de Urbanismo el planeamiento general de Ciempozuelos, iniciado por Porto y que subrogó a Plarquin. Y esperan turno de pasar por la ventanilla de Porto una veintena de planes urbanísticos -la mitad, generales- redactados por sus socios.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_