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ARTE

David Cuartielles: "El creador no debe convertirse en un científico"

"No es el crecimiento de la tecnología lo que excluye, sino la protección sistemática de los derechos de uso de la misma", afirma este ingeniero zaragozano, primer comisario español del prestigioso festival Ars Electronica

David Cuartielles nació en Zaragoza en 1974, pero se fue de España hace siete años, primero a Alemania y después a Suecia. Actualmente, reside en Malmoe, donde es director del Laboratorio de Prototipado de la School of Arts and Communication de la universidad local. Hace algo más de un año, durante una residencia de investigación en el Interaction Design Institute de Ivrea (Italia), conoció a Massimo Banzi, director del Physical Computing Laboratory, y a Dave Mellis, diplomado en el MIT, con los cuales creó el proyecto Arduino, una plataforma hardware para artistas, aunque también es empleada en el ámbito comercial.

Arduino se desarrolla bajo una licencia similar al Open Source, que permite a cualquier persona tener acceso a las tres componentes de la creación: el circuito electrónico, el software para programarlo y los módulos educativos para aprender a utilizarlo, de forma que artistas y diseñadores sin conocimientos previos de electrónica pueden crear instalaciones con sensores "en un espacio de sólo cinco sesiones".

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Arduino:

En menos de un año, Arduino entró en los programas de más de 20 universidades, incluidas UCLA de Los Angeles, RCA de Londres, ITP de Nueva York, UPC de Barcelona, K3 de Malmoe y Domus Academy de Milán.

Casey Reas, uno de los fundadores de la plataforma de programación Processing, le invitó a presentar Arduino en los Prix Ars Electronica, donde recibió una mención honorífica. Además, Cuartielles fue nombrado comisario del Electrolobby, la sección más experimental del festival austriaco, convirtiéndose en el primer español en desempeñar tal cargo en un festival de este prestigio.

Pregunta. ¿Cómo describiría la situación de España en el campo del arte digital?

Respuesta. En alza. Nuestro país está viviendo una serie de transformaciones sociales y se está alcanzando un grado tal de introducción tecnológica que nos pone, educativamente, a la par con otros países europeos, pero aún queda mucho que cambiar en la universidad española.

P. ¿Considera que Ars Electronica puso en práctica la tesis propuesta por el título del festival (Simplicity)?

R. La simplicidad en la creación tiene un doble sentido que se aplica tanto al proceso generativo de la pieza como al resultado del mismo. Aunque el creador debe adquirir conocimientos que van más allá del campo que tradicionalmente entendemos como artístico, no debe convertirse en ingeniero.

P. ¿Se considera más artista o científico?

R. Yo no termino de considerarme ni lo uno ni lo otro, sino como el catalizador de un proceso creativo. Yo trabajo en una media de ocho o nueve piezas al mes en paralelo y colaboro con unas 25 personas, creando experiencias y transmitiendo emociones para distintas audiencias. Muchas veces sólo actúo como intermediario entre varios creadores. Otras doy soporte técnico en producciones que requieren el uso de determinadas tecnologías. No tengo tiempo para tener mi producción propia, aunque cuento con una cartera relativamente extensa.

P. ¿Existe el riesgo de que Ars Electronica se convierta en un escaparate para ingenieros?

R. Intentamos todo lo contrario, que los artistas puedan acceder a una parcela del conocimiento que hasta ahora les estaba vetada. Yo, como ingeniero, creo que mi educación fue un camino doloroso hacia un título académico.

P. ¿El arte digital será cada vez más un trabajo en equipo?

R. No creo que el arte digital vaya siempre a ser el producto de trabajo en equipo. Si conseguimos alcanzar esa sencillez, más creadores podrán dedicarse al trabajo individual.

P. ¿La complejidad del entorno convertirá el arte digital en algo cada vez más elitista?

R. No lo creo, Arduino y otros proyectos similares defienden la democratización de los conocimientos. No es el crecimiento de la tecnología lo que excluye, sino la protección sistemática de los derechos de uso de la misma, lo cual se puede aplicar al arte. Hace unos años, las mejores piezas venían de Europa del Este, porque los artistas tenían acceso a tecnologías precarias, así que su proceso creativo se centró en explorar en profundidad las posibilidades de los ordenadores.

ARDUINO: www.arduino.cc

David Cuartielles.
David Cuartielles.

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