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PSOE y PP suscriben que no haya más regularizaciones de inmigrantes

Los dos partidos que han gobernado en España en los últimos 24 años y que no se ponen de acuerdo en nada desde hace dos años coinciden en rechazar nuevas regularizaciones extraordinarias de inmigrantes. La oleada de cayucos que han llegado a Canarias en el último mes y medio -más de 5.000 inmigrantes irregulares han entrado a España en ese plazo a través del archipiélago- ha provocado un cambio de rumbo en la política de inmigración.

La semana pasada la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega endureció el discurso oficial para avisar de que el Ejecutivo expulsará a todos los inmigrantes que entren irregularmente en España. Lo hizo coincidiendo con una encuesta de la cadena SER que situaba a la inmigración como el problema que más preocupaba a los españoles. El presidente del Gobierno reiteró ese discurso dos días después, y el número dos del PSOE, José Blanco, insistió ayer en una entrevista concedida a EL PAÍS.

Los dos grandes partidos desean dialogar sobre el problema que más preocupa a los españoles
Los socialistas dan un giro radical y endurecen su posición ante la oleada migratoria
Rajoy propone que por ley se prohíban las legalizaciones masivas de extranjeros
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Giro en inmigración

El PP propone ahora modificar la Ley de Extranjería para prohibir nuevas regularizaciones extraordinarias, aunque el PSOE asegura que no piensa modificar la norma que aprobó el Gobierno popular en 2003. Pese a todo, los socialistas reiteran su rechazo a nuevas regularizaciones. En los últimos 20 años ha habido ocho regularizaciones extraordinarias, con las que 1,2 millones de inmigrantes han logrado papeles. De ellos, 720.000 fueron regularizados por el PSOE.

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