La muerte de otros dos linces en Andalucía activa las alarmas
La organización ecologista WWF/Adena exigió ayer responsabilidades políticas a la Junta de Andalucía tras la muerte de otros dos linces durante el fin de semana, ya que considera que su actuación ha sido "ineficaz". Estas últimas muertes sitúan, a su juicio, a la población de esta especie de felino en Doñana en un punto "crítico e insostenible", ya que este año se han perdido un 10% de sus ejemplares.
Un macho joven apareció atropellado el pasado sábado en la carretera A-483 (tramo Almonte-El Rocío), en los kilómetros 23-24, en la conocida como curva de Simón. Y también el pasado sábado la lince Thais, atropellada el 15 de julio en Rociana del Condado, en la zona conocida como Las Vaquerizas, moría por deshidratación en el centro de recuperación de El Acebuche.
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La carretera A-483 entre las localidades onubenses de Almonte y Matalascañas presenta el triste récord de linces atropellados, con un total de 14 desde 1982, de los cuales cinco han muerto desde 2000. Las altas velocidades que se alcanzan en esta vía, así como el aumento del tráfico de vehículos privados, sin que los responsables políticos hayan puesto en marcha medidas para disminuir ni una ni otra (instalación de radares, limitación de velocidad en zonas sensibles, aumento del transporte público), tienen como consecuencia el alto número de atropellos, según la organización ecologista.
WWF/Adena considera "inaceptable que el lince ibérico acabe extinguiéndose por una causa tan absurda como los atropellos sin que se tomen medidas eficaces para que no ocurran", según señala en un comunicado.
Petición de la Junta
Por su parte, la Junta de Andalucía ha pedido a la Dirección General de Tráfico (DGT) que coloque "de forma permanente" barreras de control de velocidad en la carretera que une Almonte y Matalascañas para evitar que continúen los atropellos de linces. Esta petición se produjo tras una reunión el pasado viernes del Pacto Andaluz por el Lince, en el que está representada la Administración autonómica y diversos colectivos.
Fuentes de la Consejería de Medio Ambiente comentaron que la Junta se ha puesto en contacto con la DGT y ha dado traslado de esta petición, que ha sido planteada en numerosas ocasiones por diversos colectivos ecologistas. Concretamente, Ecologistas en Acción recordó el pasado sábado que entre sus propuestas está la de reducir el límite de velocidad a 40 kilómetros por hora en todas las carreteras que atraviesan áreas con presencia de linces, estableciendo controles de velocidad en toda la comarca.
Los Verdes reclamaron ayer la reducción del límite de velocidad, como máximo a 60 kilómetros por hora, en las carreteras del entorno del Parque Doñana, como principal medida para evitar los atropellos de linces.
