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ENSEÑANZA

Los juegos educativos amplían su oferta para los ordenadores de las escuelas

El alumnado tiene un papel más activo y la figura del profesor aumenta como administrador del proceso

"Mi hijo, con cuatro años, ¡y ya utiliza ordenador en el colegio!", comentan muchos padres con orgullo. Pero, en realidad, esto equivaldría a decir hace 25 años: "Mi hijo, con cuatro años, ya coge la tiza en el colegio". Para los pequeños, clicar y manejar el ratón es natural. El uso de los ordenadores se concibe cada vez menos como una actividad extraescolar. El ordenador tiende a ser una herramienta más del aula.

Uno de los cambios importantes de este nuevo escenario es "la modificación de papeles de los protagonistas de la clase: el paradigma orador-oyente pasivo se modifica", explica Cristina Domínguez, responsable de contenidos de Pedagogía Interactiva. Esta empresa, formada por socios educativos, tiene el propósito de ofrecer a las instituciones educativas las herramientas y servicios necesarios para una implantación sostenible (sin grandes inversiones ni competencias tecnológicas por parte de los usuarios) de las TIC en los ámbitos del aprendizaje, la comunicación y la gestión.

"El alumnado tiene un papel más activo, el intercambio entre docentes y alumnos es más colaborativo y la figura del profesor adquiere una nueva dimensión como verdadero administrador de todo el proceso", dice Domínguez. "Este cambio requiere de circunstancias favorables, tanto en el ámbito de las dotaciones tecnológicas a los colegios como, sobre todo, de la formación y motivación de los docentes".

La oferta de software educativo es amplia para los niños en edad preescolar, que suelen disfrutar con este tipo de producto. "Los niños se sienten protagonistas de los juegos, y aprenden, sin darse cuenta y divirtiéndose, a utilizar el ordenador, pero también el lenguaje, los idiomas, las mates o civismo", dice Inés Garat, psicóloga y miembro del Departamento de Orientación de una escuela concertada en Barcelona. Los programas educativos tienen distintos niveles de dificultad y se adaptan fácilmente al nivel y al ritmo de aprendizaje de cada alumno.

Los comentarios de los personajes de los juegos siempre son positivos y los escenarios son atractivos para el público infantil. Con todo esto, el alumno suele estar muy motivado ante el escenario multimedia tanto en casa como en el colegio.

"La innegable importancia de lo visual y lo auditivo en el mundo actual conecta de forma natural con el aprendizaje a través de las actividades multimedia", afirma Domínguez.

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