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Entrevista:JULIETA VENEGAS | Cantante y compositora

"Cuando me emborracho, canto rancheras"

Pregunta. Su nuevo trabajo es Limón y sal. Falta el tequila.

Respuesta. El tequila o lo que sea. Porque el limón y la sal hacen que todo sepa más rico.

P. Con tequila o sin él, ya lleva un disco de oro.

R. Y mejor con tequila para celebrarlo. Creo que el disco de oro vino por la expectativa de Sí, el anterior, y eso empujó. Si no es eso, no lo entiendo.

P. Aparte del Grammy Latino tiene muchos premios. ¿Se los merece o fue una lotería?

R. Seguramente fue la lotería. Si no, alguien está como equivocándose. Pero que no se den cuenta.

P. ¿Por qué vende tanto el amor roto?

R. Es una buena pregunta. Pero mi primer disco que vendió, , hablaba de amor feliz. En México nos encanta el despecho, viene como de José Alfredo y de Chavela.

P. ¿Y usted padece más de bolero o de ranchera?

R. De ranchera.

P. Va de enamoradiza. ¿No deja músico con cabeza?

R. Pero no es por músicos, sino porque me gustan. Uno no puede decidir de quién se enamora. Por mí, evitaría los músicos completamente. Por lo menos en cuestiones románticas.

P. "Por qué no tuviste el valor de ver quién soy". ¿Quién es?

R. Pues supongo que soy una persona directa, que digo lo que pienso, y a veces eso asusta a la gente.

P. Estudió con las monjas del Espíritu Santo. ¿Le quedaron secuelas?

R. Sííí, puro trauma. Mi pobre padre se la pasaba diciendo: "Uy, para esto las mandé a una escuela católica". Me quedó una alergia a cualquier tipo de represión, al no lo hagas, tanto en la escuela como en mi familia, que era muy estricta y conservadora.

P. Y ahora no se pone límites.

R. Pues no. Me los pongo en lo normal. Creo que tengo cierto perfil que me dejó mi familia, pero hago las cosas que me apetece hacer, y luego veremos.

P. "Nunca creí en la felicidad". Es usted la alegría de la huerta.

R. No. Lo que pasa es que soy muy escéptica. No es que sea una desencantada; al contrario, creo que me río bastante de las cosas y les pongo mucho sentido del humor.

P. ¿Y de qué se ríe?

R. De todo. Del desamor en especial. Es lo mejor.

P. Por eso se da tantas oportunidades de practicarlo. No para.

R. Claro. Reírse es lo mejor. Aunque yo dejo a los hombres voluntariamente. Bueno, no siempre. No son para mí una actividad.

P. ¿Lo canta todo usted o se lo reparte con su hermana Yvonne, aprovechando que son gemelas?

R. Todo yo [ríe]. A mi hermana le encanta cantar rancheras cuando se emborracha.

P. ¿Y usted qué canta en esa tesitura?

R. ¿Cuando me emborracho? También rancheras.

P. Participó en el concierto latino Valladolid más Colón. ¿Qué tal Colón?

R. Yo le tengo como más tirria a Hernán Cortés, que es el que nos cayó a nosotros.

P. Compuso la música de la obra Calígula probablemente, de Francisco Franco. Vaya nombrecitos.

R. ¿Verdad? [Risas] Pero bueno, mi Francisco Franco es otra cosa. Es de Aguascalientes. Allá les dicen hidrocálidos.

P. "Tras su aparente fragilidad e inocencia, es capaz de convencer al incrédulo". Qué cosas dice su discográfica.

R. Yo no soy frágil para nada, la verdad. E inocente, menos. La inocencia la aparento.

P. Se compró 40 pares de zapatos en tres meses. ¿El llamado complejo de Imelda?

R. No, para nada. Espero que no. Es que descubrí los tacones y fue una excusa para comprarme toda una zapatería nueva.

P. ¿Son su debilidad?

R. Y los libros, en realidad. Los zapatos creo que pasaron ya a segundo plano.

P. ¿Qué querría hacer que no hace?

R. Me gustaría estar más tiempo con mi familia. Los extraño mucho todo el rato.

P. Dígame una fantasía que tenga.

R. Una playa sin nada que hacer. Me encanta el tiempo libre.

P. ¿Cómo se ve dentro de diez años?

R. No me imagino ni dentro de una semana... Siempre me ha gustado más el proceso que las metas.

Julieta Venegas, el pasado jueves en Madrid.
Julieta Venegas, el pasado jueves en Madrid.GORKA LEJARCEGI

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