_
_
_
_
_
Reportaje:EL PP MOVILIZA A SUS MILITANTES

¡España!, ¡España!; ¡Cope!, ¡Cope!

Los manifestantes, con pegatinas en defensa de la cadena episcopal y banderas del PP, se emocionaban con las llamadas a la unidad

Es difícil explicar que un artículo de la Constitución leído en la Puerta del Sol pueda emocionar a miles de personas. Pero no si es el segundo, el que habla de la "indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles". Fue recibido al grito de "España, España, España", con la entonación futbolera. Había miles de banderas nacionales, y alguna pequeña pancarta extremista -"una, grande y libre"-, pero ningún escudo anticonstitucional, como mucho algún toro.

El grito de "España, España" fue el más repetido, pero el que conquistó realmente al público, el que se hizo atronador, fue el de "Cope, Cope, Cope". De hecho, muchos manifestantes llevaban pegatinas con la bandera de España y en medio un "Gracias, Federico", por el locutor de la cadena de radio Jiménez Losantos.

Más información
Piqué admite que el Estatuto catalán motivó el acto del PP en defensa de la Constitución

El ambiente era tranquilo, sin estridencias. La meticulosa organización se ocupaba de controlarlo.

Una mujer con una pancarta del PP proclamaba: "Estoy aquí para que zetapé se entere de que existe la Constitución". "Y que no estamos contra los catalanes", terciaba otro manifestante. A lo que la mujer replicaba: "¡Cómo que no! Sí que estamos contra los catalanes, que no quieren ser españoles". "¡Que sí son españoles!", le reprendía el mismo hombre. Visto el interés de los periodistas, un miembro de la organización se acercó para desacreditar a la señora: "No le haga mucho caso, porque muy bien no puede estar".

El ambiente era relajado, de mañana soleada de sábado, pero algunos manifestantes andaban soliviantados. Un matrimonio de Badajoz con una enorme pancarta de España se quejaba: "Los socialistas sólo han creado problemas. Y como las cosas sigan así con el tema del País Vasco y Cataluña, puede que haya una guerra. ¿A qué viene todo lo que están haciendo con lo bien que estábamos? Contra los catalanes no vamos, pero hay que dejar claro que todos somos españoles", exigían.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

No eran los únicos que hablaban del conflicto civil. Luis Fernando y Purificación comentaban tras la marcha: "La Constitución está en peligro por los separatismos. El Gobierno que tenemos se ha ido arrimando a los peores, España estaba muy bien y lo ha puesto todo patas arriba; y como sigamos así puede haber una guerra, porque no se puede permitir lo que se está permitiendo: nos quitan la religión, nos ponen las bodas gays, se da papeles a todos... Y es una vergüenza lo que está pasando con la Cope, que yo los considero mis amigos porque son los verdaderos españoles.".

Un trío de jóvenes, de entre 19 y 25 años, se lamentaba de que otros partidos no se hubieran sumado a la manifestación: "Es triste que el apoyo a la Constitución lo haga sólo un partido", se lamentaban Alex, Teo y Marino. José, Antonio y Manuel, tres legionarios, portaban una bandera de España con un lema: "Legionarios a luchar, legionarios a morir".

El PP dispuso también banderas autonómicas, y en los discursos hubo euskera y catalán. La gente aplaudió, pero también se oyeron algunos pitos mientras se hablaba en esas lenguas en la tribuna. Cuando Rajoy defendía a la monarquía, un hombre muy engominado gritó: "¿Por qué está callada?". Los nostálgicos del antiguo régimen, que alguno había, eran pocos. Un señor no pudo contenerse e hizo el saludo fascista mientras gritaba el "¡Viva!" a la "nación española".

La organización no quería transformar la concentración en una protesta contra el Estatuto y Cataluña, pero a veces era inevitable. Incluso se vendían a un euro pegatinas con el logotipo ensangrentado copiado del No a la Guerra, pero esta vez con un No al Estatut.

Muchos habían acudido a las otras dos manifestaciones apoyadas por el PP, la de los matrimonios gays y la de educación. "La izquierda pensaba que la calle era suya, y mire", se reía Luis, un jubilado madrileño. "Yo nunca había ido a manifestaciones, pero no puedo más. ¿Qué es eso de sacar los muertos de la tierra y hacer homenajes a Carrillo?". Su compañero Pablo asiente: "Los catalanes y zetapé se quieren cargar la Constitución". ¿Si así fuera, no lo impediría el Tribunal Constitucional? "Eso está controlado por el Gobierno, no me fío", insiste Pablo. ¿Oiga, y ustedes votaron la Constitución en el 78? "Yo sí", dice Pablo, mientras Luis mira para otro lado.

De izquierda a derecha: Floriano, lider del PP extremeño, Zaplana, Ruiz-Gallardón, Acebes, Rajoy, Aznar, Botella, Aguirre, Arenas y Piqué.
De izquierda a derecha: Floriano, lider del PP extremeño, Zaplana, Ruiz-Gallardón, Acebes, Rajoy, Aznar, Botella, Aguirre, Arenas y Piqué.ULY MARTÍN

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_