El Gobierno vasco apura con el PSE la negociación del Presupuesto

El Gobierno vasco afronta hoy el debate de las tres enmiendas a la totalidad a sus Presupuestos para 2006, presentadas por el PSE, el PP y EHAK, sin la garantía de que no serán rechazados, pese a la votación por separado de las enmiendas impuesta por la presidencia de la Cámara. El Ejecutivo de Juan José Ibarretxe mantenía abierta a medianoche una intensa negociación con los socialistas, acuciado además por la necesidad de neutralizar una posible maniobra de última hora del PP que apoyase la enmienda socialista.

El Gobierno de Juan José Ibarretxe y el PSE mantuvieron contactos e intercambiaron documentos durante todo el día de ayer. Ambas partes guardaron un mutismo total. "Sólo tenemos puesta la mirada en el pleno de mañana (por hoy)", se limitaron a señalar fuentes de la Vicepresidencia, en cuya sede se desarrollaba la negociación desde las cinco de la tarde. Un acuerdo cerraría un ciclo de siete años desde que el PSE salió del Ejecutivo vasco, en 1998, y el PNV optó por la unidad nacionalista, primero, y por los gobiernos en minoría después. Los dos socios de Ibarretxe (EA y EB) se seguían mostrando ayer más proclives a un acuerdo con la izquierda abertzale de EHAK.

El Gobierno vasco ha agotado las fechas y no abordó realmente la negociación hasta el miércoles, una vez que EHAK, el otro grupo cuyo apoyo ha buscado, se apeó de ella. Tanto EHAK como el PP repitieron ayer que hoy mantendrán su enmienda. Ambos dieron por hecho un acuerdo del PNV con los socialistas, paralelo al que han alcanzado ambos en el Congreso sobre los Presupuestos del Estado.

La presidenta de la Cámara, Izaskun Bilbao (PNV), ha impuesto, como hizo desde 2001 su predecesor, Juan María Atutxa, la votación de las enmiendas por separado para evitar la derrota del Ejecutivo. En respuesta, el PP advirtió ayer de que no descarta votar la enmienda socialista para forzar la devolución del proyecto. El Ejecutivo necesitaría así los votos de EHAK si el PSE no retira su enmienda como fruto de la negociación. Para salir adelante, una enmienda necesita mayoría simple.

Ibarretxe sólo cuenta con el respaldo de 32 de los 75 escaños de la Cámara. Socialistas y PP juntos suman 33, EHAK tiene nueve y Aralar, uno. Los Presupuestos ascienden a 7.623 millones de euros.

Un acuerdo con el PSE rompería la conflictiva dinámica presupuestaria que ha caracterizado todo el mandato de Ibarretxe. Desde su elección en 1998, el lehendakari no ha gozado de más ley de Presupuestos pactada y holgada de apoyos que la de 2000, cuando acordó las cuentas con Batasuna, entonces EH. Para 2001, las prorrogó y las de 2002 las sacó adelante rodeadas de escándalo, primero por la votación separada de las enmiendas de devolución, y después porque se aprobaron unas secciones sí y otras no. El Tribunal Constitucional las anuló más tarde.

Los de 2003 salieron adelante al no llegar a tiempo a votar el parlamentario popular Jaime Mayor Oreja. Los de 2004 fueron derrotados y los de este año, salvados por un error en el sistema de votación de una parlamentaria socialista, están pendientes de un recurso socialista que el Constitucional admitió a trámite hace un mes.