"La autopista entre Vera y Cartagena es la carretera de la especulación"
Jaime del Val, un madrileño de 31 años que vive a caballo entre su ciudad natal y Mojácar, es el autor, como presidente de la plataforma ciudadana Salvar Mojácar, del informe (www.salvarmojacar.org) sobre la especulación urbanística en el Levante de Almería y sur de Murcia. Comenzó sus primeras reivindicaciones hace casi dos años, criticando "el desarrollo irracional".
Pregunta. ¿Qué problemas urbanísticos denuncia en su informe?
Respuesta. El principal lastre del Levante almeriense es que en ocho municipios de la cuenca del bajo Almanzora hay preparada la mayor operación urbanística de la historia europea. Quieren recalificar una zona de más de 200 millones de metros cuadrados en un plazo de unos diez años sin previsión de las infraestructuras necesarias, ni siquiera para la población que existe ya. Y, por supuesto, tampoco para las personas que vendrán a vivir los próximos años, que multiplicarán la población por 30.
"En ocho municipios de la cuenca del bajo Almanzora quieren recalificar una zona de más de 200 millones de metros cuadrados en 10 años"
"Me gustaría saber si habrá agua desalada suficiente para los dos millones de personas que podrían venir a vivir en la zona"
P. ¿Cuántas viviendas se van a construir?
R. Si sale adelante la planificación actual se construirán unas 400.000 viviendas, pero sólo en la cuenca del bajo Almanzora, no en todo el Levante de Almería. En la actualidad hay unas 15.000 viviendas en la línea de playa de Mojácar y Vera. Esa es una zona llana que no está protegida, y eso es una carnaza muy apetitosa.
P. En el informe, ¿critican la construcción de la autopista entre Cartagena y Vera?
R. Entre nosotros decimos que la autopista es la carretera de la especulación. Esta autopista cubre uno de los tramos de carreteras de más baja circulación de toda España. Se construye exclusivamente pensando en el desarrollo urbanístico de toda esta zona, para hacerlo posible y viable. Pero las demás infraestructuras, que deberían ser prioritarias, no se atienden en absoluto. Hay un déficit importante que se manifiesta en las dos depuradoras, que están saturadas y contaminan los ríos. Las carreteras experimentan unos grados de colapso que dejan en nada los atascos de Madrid en hora punta. Aquí, en verano, puedes tardar entre media hora y una hora en recorrer un kilómetro en coche. La electricidad falla a menudo y hay muchos cortes de suministro. Me gustaría saber si habrá agua desalada suficiente para los dos millones de personas que podrían venir a vivir a la zona, sin olvidar los 50 o 60 campos de golf proyectados.
P. ¿En el documento habla de la connivencia entre la construcción y la delincuencia?
R. Todo este proceso está anclado en el dinero negro y en las mafias internacionales, que son las que están dominando el mercado del blanqueo de dinero. No se busca beneficiar al ciudadano sino la finalidad es que las mafias se instalen. Cuando se destapó el caso Ballena Blanca uno de los fiscales dijo que existe aparentemente un pacto entre ámbitos de la Administración y las mafias mientras no cometan aquí delitos y cooperen en la lucha antiterrorista. Si a esto añadimos el auge de las promotoras y que según el Tribunal de Cuentas un tercio de la financiación de los partidos políticos es ilegal y procede de la construcción, ¿qué más podemos decir al respecto? La corrupción afecta a todos los aspectos de la construcción.
P. En el Levante almeriense les critican desde todos los partidos políticos.
R. En el tema urbanístico no hay colores políticos. Aquí no sólo nos hemos querellado con alcaldes del PSOE y del Partido Popular, sino también de Izquierda Unida y ecologistas. Tenemos claro que la corrupción está asociada a la gestión urbanística. Nosotros estamos muy alejados de la cuestión política, sólo queremos acabar con esta expansión urbanística exagerada.
