El aluvión sume en el caos a la provincia de Tarragona
Por tierra, por mar y por aire. El temporal sumió ayer en el caos a la provincia de Tarragona, donde numerosas carreteras quedaron cortadas, se paralizó el aeropuerto de Reus y un vertido de hidrocarburos contaminó el litoral. Además, miles de viviendas se quedaron sin luz y docenas de casas sufrieron inundaciones. Según datos del Servicio de Meteorología de Cataluña, la tromba de agua registró su cifra récord en Constantí (Tarragonès), con 208 litros entre el martes y ayer.
Los Bomberos de la Generalitat no dieron abasto ayer ante el alud de llamadas de emergencia procedentes del Camp de Tarragona y las Tierras del Ebro. Aldover (Baix Ebre) recogió 178 litros, Vinyols i els Arcs (Baix Camp), 165 y El Perelló (Baix Ebre), 139. En ciudades como Reus y Tarragona se superaron los 150 litros. Decenas de rieras, incapaces de canalizar tanta agua en poco tiempo, provocaron inundaciones en todo el territorio. Carreteras como la T-11, que une Tarragona y Reus, la autovía entre Tarragona y Salou, la C-12 y la N-340 quedaron temporal o totalmente inutilizadas a lo largo de la mañana de ayer. Al margen de estas vías principales, un sinfín de carreteras secundarias y caminos quedaron convertidos en ríos.
Hubo, no obstante, un único herido, un profesor del colegio Sant Rafel de Tarragona, a quien le cayó un muro de un aula encima a causa de la lluvia. El hombre fue dado de alta al mediodía tras recibir atención en el hospital Joan XXIII de Tarragona. Los bomberos tuvieron que rescatar a los ocupantes de dos turismos, uno en Tortosa y otro en Alcover (Alt Camp), que fueron arrastrados por el agua. En el aeropuerto de Reus no salió ningún vuelo hasta las 14.30 y los 10 aviones que debían aterrizar habían sido desviados a Girona o El Prat.
Miles de usuarios sin luz
Miles de usuarios permanecían ayer por la tarde sin luz, tanto en el Baix Ebre y el Monstià como en el Tarragonès y el Baix Camp. La compañía FECSA-Endesa, que no ofreció la cifra concreta de clientes sin servicio, explicaron que los fallos en el suministro estaban provocados en su mayoría por la inundación de los transformadores instalados en los bajos de las viviendas.
El mar también sufrió las consecuencias del temporal. La Generalitat activó al mediodía en fase de alerta el plan especial de emergencias por contaminación accidental de aguas marinas (CAMCAT) a causa de una mancha de hidrocarburo de dos kilómetros de longitud que apareció en la zona sur del litoral de Tarragona y fue desplazándose hacia Salou y La Pineda. La Generalitat atribuyó la mancha a Repsol YP, aunque no descartó otros focos de contaminación procedentes del polígono químico sur de Tarragona, que quedó inundado. Repsol admitió ayer que el aluvión anegó sus instalaciones y arrastró las aguas sucias al mar.
