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El proceso para el final de ETA

El obispo Uriarte medió en la huelga de hambre del etarra

El obispo de San Sebastián, Juan María Uriarte, ha intermediado, junto a otras personas, para buscar salidas a la situación creada por la huelga de hambre del etarra Juan Ignacio De Juana Chaos. Uriarte hizo gestiones para intentar que el etarra abandonara su actitud, según fuentes conocedoras de la actuación del obispo.

El etarra puso fin ayer a la huelga de hambre que mantuvo durante 63 días y que le llevó al hospital. Su compañera sentimental también ha desempeñado un papel importante a la hora de convencer a De Juana Chaos.

El obispo Uriarte, según las mismas fuentes, ha intercedido telefónicamente en varias ocasiones con la familia de De Juana y con el propio Gobierno ante el convencimiento de que la deteriorada salud del dirigente de ETA, se llegó a temer por su vida, se podía convertir en un obstáculo insalvable para el proceso abierto de fin de la violencia terrorista en Euskadi.

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El Gobierno, que conoció las gestiones de Uriarte, prefirió ayer no opinar sobre las mismas, aunque recordó que el obispo fue una persona clave en las negociaciones que el Ejecutivo del PP mantuvo con ETA en 1998.

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