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El puesto honorífico de Zarrías

Ginés Donaire

El nuevo secretario provincial del PSOE de Jaén, Francisco Reyes, elegido en el congreso extraordinario del pasado sábado, defendió ayer la elección de Gaspar Zarrías como presidente del partido, una decisión que sorprendió a todos los socialistas andaluces y que no ha sido del agrado de José Antonio Griñán, porque no era lo acordado cuando apoyó su entrada en la ejecutiva federal como responsable de Política Autonómica en sustitución de Mar Moreno. "No me lo esperaba, no lo sabía", reconoció el martes en la SER. Reyes, que no desveló la presidencia de Zarrías hasta poco antes de votarse la nueva dirección, dijo que pensó en él por ser una persona "que no iba a tener la más mínima contestación interna y que fue aplaudido por la mayoría".

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Zarrías, que ha ocupado durante 16 años la secretaría general del PSOE jiennense, es ahora el número cuatro en el escalafón de la Ejecutiva Federal socialista, además de presidente del partido en Jaén, un puesto, que según Reyes, "es honorífico y no ejecutivo", en contra del giro que Griñán quiere dar a la presidencia del partido en Andalucía.

Reyes optó por darle la presidencia del partido relevando al linarense Manuel Rodríguez Méndez, a quien el partido le ha prometido un puesto en el Comité Director del PSOE. El malestar en la agrupación de Linares es patente. "Esto no ha acabado aún", dijo un dirigente.

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