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Gómez: "No se puede poner patas arriba la reforma laboral"

El Gobierno pide diálogo. Quiere que sindicatos y empresarios vuelvan a sentarse en una mesa y negociar. Pero no a cualquier precio. El ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, ha ofrecido a las fuerzas sociales participar y pactar el desarrollo de la reforma laboral (reglamentos, decretos, leyes...). "Si no alteramos sus objetivos esenciales [los de la reforma] podemos tratar de discutir aspectos de ella", analizó Gómez. Pero también avisó: "Si se pretende poner patas arriba, será difícil que haya puntos de encuentro".

El nuevo responsable de Trabajo, que ayer cumplía una semana en el cargo, dijo que un Gobierno "no puede estar cambiando de posición de un día para otro". No obstante, se mostró partidario en TVE de "recomponer el equilibrio", ya que "no hay política laboral que se desarrolle sin equilibrio; es difícil si quienes la tienen que poner en marcha en las fábricas, en los comercios, en los centros de trabajo, no están de acuerdo".

Junto al desarrollo reglamentario de la reforma laboral, Gómez también apuntó otros aspectos, como las políticas activas de empleo, la reforma de la negociación colectiva y las pensiones. Sobre estos asuntos es donde se debería desarrollar el diálogo social.

Al primero de ellos, las políticas activas de empleo, les puso fecha: "A la altura de febrero tenemos que tener preparado un paquete de medidas en ese punto". Para esta tarea mostró especial confianza en la secretaria de Estado de Empleo que el Consejo de Ministros nombrará hoy, María Luz Rodríguez.

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