El principal opositor a Hugo Chávez sufre una nueva agresión
El principal candidato opositor venezolano, Manuel Rosales, responsabilizó ayer al presidente, Hugo Chávez, de cualquier daño que pueda sufrir, después de que un grupo de presuntos partidarios del Gobierno le agrediera el jueves durante una visita a una barriada pobre de Caracas.
Los incidentes comenzaron cuando los "chavistas", vestidos con las camisas rojas de las Misiones (programas sociales gubernamentales) atacaron con piedras y disparos a la caravana del candidato.
Según Rosales, se trató de una emboscada ordenada por el propio Chávez quien, a su juicio, está nervioso por el crecimiento de su adversario en las encuestas. "Comenzaron a temblarle las piernas demasiado temprano", aseguró.
Es la segunda vez en una semana que Rosales y sus seguidores son víctimas de una acción violenta. El martes, unos desconocidos rociaron con aerosol paralizante al político Roberto Smith, que caminaba junto a Rosales en la ciudad de La Guaira, vecina a Caracas.
El incidente del jueves ocurrió tras varias horas de tensión entre simpatizantes de la revolución bolivariana y los integrantes de la comitiva del candidato.
Rosales, de 52 años, es el gobernador del Estado petrolero de Zulia. Es socialdemócrata y lo respalda una amplia coalición de fuerzas opositoras de diverso signo. El ministro del Interior, Jesse Chacón, negó que el Gobierno haya emboscado al candidato y aseguró que las autoridades policiales han designado un equipo de guardaespaldas para garantizar su seguridad.